Lleva una manta de viaje en tu próximo vuelo
Conciliar el sueño en un avión puede ser un desafío, especialmente sin una manta de viaje que proporcione la temperatura adecuada.
Previo a abordar, y mientras permaneces en tu asiento hasta el próximo destino, los cambios de temperatura suelen estar entre los peores enemigos de un viajero. Una manta de viaje mantienen la temperatura corporal y es fácil de almacenar en tu equipaje.
Para que conozcas otras ventajas de estos textiles, te invitamos a conocer datos clave para viajar con comodidad hogareña en un avión.
Entre los imperdibles en tu maleta está la manta de viaje para garantizar un descanso reparador y la comodidad superior que pueden brindarte sus materiales.
Si estás pensando en muchas horas de vuelo, puedes incluir en tu equipaje accesorios como una máscara de ojos, tapones para los oídos y calcetines cómodos.
Ventajas de una manta de viaje
Cuando estás abordo, el dormir a buena temperatura es de primera necesidad. Todo empieza al reclinar el respaldo de tu asiento, quitarte los zapatos y extender tu manta antes de cerrar los ojos.
Aunque te proporcionan un kit esencial de vuelo previo al despegue, nunca será como el que llevas en tu bolso. La manta de viaje está entre los objetos personales que los viajeros escogen por sus características.
- Te ayudan a mantener la temperatura corporal durante el vuelo.
- Tienen diseños versátiles que se adaptan a tus necesidades.
- Los materiales suaves y cálidos garantizan un sueño placentero.
- Las mantas de viaje son compactas y fáciles de transportar.
- Hay opciones asequibles para todos los presupuestos.
Volar cómodamente con tu manta de viaje
Las mantas de vuelo son cruciales para quienes viajan frecuentemente. Ofrecen comodidad y evitan el frío molesto del aire acondicionado en tu cabina.
También atrapan el calor y muchas de ellas son de lana o microfibra, ideales para los cambios de temperatura, creando la sensación de tranquilidad en tu cuerpo.
Diseños versátiles para adaptarse a tus necesidades
Sus diseños son variados y se ajustan a todos los estilos. Puedes escoger entre modelos compactos o muy abrigados.
Estos textiles se han transformado en accesorios indispensables en todos los viajes. Su variedad de diseños y su poder para retener el calor son clave para quienes aman viajar sin renunciar a la comodidad.
Materiales suaves y cálidos
En un vuelo largo con cambios de temperatura y los efectos del jet lag en tu cuerpo, los materiales de una manta de viajes son esenciales para tu comodidad al dormir. Muchos viajeros las prefieren de algodón, polar, franela, microfibra o lana para descansar sin inconvenientes.
El algodón natural es conocido por su suavidad y frescura, lo que mejora notablemente con un relleno de plumas para un aislamiento eficiente, incluso en las peores condiciones. Otro imperdible es el polar, escogido también por la suavidad en sus de fibras sintéticas, aislamiento térmico y durabilidad a toda prueba.
La franela es un material suave en una manta de viajes y es perfecto para mantener la temperatura corporal. Si prefieres la microfibra, también es una excelente alternativa porque es liviana y fácil de guardar, ideal para viajes con mucho equipaje.
Pero la reina entre las fibras naturales es la lana, al conservar el calor y adaptarse perfectamente a tu cuerpo mientras duermes, ofreciendo un descanso reparador y una temperatura ideal.
Escoger una manta de viajes está asociado a pensar en comodidad y descanso. Recuerda que no solo importa cómo te sientes en un avión, también es clave escoger los materiales adecuados para asegurar un descanso reparador por mucho tiempo.
Mantas de viaje compactas y portátiles
Al elegir una buena manta de viaje, la facilidad para trasportarla es clave si quieres que te acompañe en todos tus destinos.
Las mantas de viaje pequeñas y plegables son fáciles de llevar y guardar. Por su tamaño, se enrollan o doblan fácilmente.
Además, vienen con bolsas para transportarlas con comodidad en tu maleta. Así, puedes llevarlas colgadas o dentro de tu equipaje sin afectar su integridad.
Fácil de llevar y guardar
Las mantas de viaje plegables son ideales para viajeros que quieren ahorrar espacio. Son pequeñas y proporcionan un equilibrio justo entre la comodidad y ligereza para no aumentar el peso en tu equipaje.
Escoger una manta de viaje compacta y fácil de llevar, permite viajar sin estresarte por el peso de las maletas. Además son resistentes y durables.
Los cuidados de una manta de viajes
Si ya es hora de guardar tu manta de vuelo esta temporada, asegúrate de que esté limpia y totalmente seca. Si lo prefieres, puedes llevarla a una lavandería o meterla en tu lavadora, respetando las instrucciones del fabricante.
Si planeas utilizarla un poco más, la recomendación es sacudirla para eliminar el polvo antes de guardarla al interior de una bolsa o una caja. También puedes extender la manta sobre la cama y aspirarla suavemente.
Si cuidas adecuadamente una manta de viaje, podrás contar con ella por muchos años. La duración media de estos textiles está entre los 5 y los 15 años, dependiendo del material utilizado para su confección.
Dimensiones de una manta de viajes
Cuando busques una manta de viaje, escoge la opción que más se ajuste a tus necesidades al dormir. La oferta es amplia y el mercado la empaca en una amplia variedad de colores y tamaños.
Estas son las medidas preferidas entre los viajeros.
- Mantas pequeñas 1,05 x 1,65 cm.
- Mantas medianas 1,00 x 1,50 cm.
- Mantas grandes 1,30 x 1,60 cm.
Elegir la manta apropiada para tu próximo destino no es una cuestión estética, sus dimensiones pueden asegurarte un vuelo cómodo y la capacidad de mantener la temperatura de tu cuerpo.
Mantas para todos los presupuestos
Hay mantas de viaje premium pero también hay opciones asequibles y efectivas que puedes escoger.
- Mantas de viaje económicas, están hechas con telas suaves y térmicas, ideales para estabilizar la temperatura corporal durante el viaje.
- Modelos baratos y compactos, son fáciles de guardar en una maleta sin que ocupen mucho espacio.
- Diseños cómodos, podrían ser los que busques por su versatilidad y utilidad, más allá del avión.
Como ves, puedes conseguir una manta de viajes adecuada con cualquier presupuesto. Estos artículos están a tu alcance en todo el comercio.
Conclusión:
Para escoger la manta de viaje perfecta, sigue estos consejos: presta atención en sus materiales de confección y escoge textiles suaves, cálidos y durables.
El tamaño también es importante para que tu manta sea cómoda en el avión. Escoge un producto liviano y procura que sea fácil de llevar mientras quepa perfectamente en tu equipaje.
Finalmente, busca una opción que no sea costosa, hay mantas de calidad al alcance de todos, sin tener que gastar mucho dinero.
Con una manta de viaje a mano, el próximo vuelo en tu calendario será más cómodo y placentero que los anteriores. Prepara tu próximo destino.
¡Buen viaje!